Quizás entender el diagnóstico de un tumor es una de las tareas más complicadas tanto para los pacientes como para los profesionales del sector. Este es el motivo por el que los profesionales decidieron crear un código internacional basado en determinada nomenclatura que facilita su entendimiento que, apoyado por el diagnóstico y la lectura de médicos expertos, ayuden a comprender mejor el estado de un tumor y encontrar su tratamiento más eficaz.
Según los oncólogos “existe una clasificación del grado del tumor basándose en unas pautas internacionales, lo que se conoce como el código TNM”.
Estos criterios “clasifican el tamaño, extensión y grado de malignidad que posee el cáncer”, afirman los patólogos y oncólogos. Gracias a estos parámetros, los diagnósticos son universales y se pueden compartir con todos los facultativos del mundo, facilitando así los diagnósticos efectivos basados en informaciones cruzadas.
El TNM responde a:
T: Se refiere a la extensión y el tamaño del cáncer primario. Sus percentiles oscilan entre uno y cuatro y hace referencia a los centímetros del tumor.
N: Clasifica si existe o no infección en los ganglios y su porcentaje. Esto se mide en una escala del uno al tres y se puede emplear el número cero para aquellos tumores que no han afectado a la zona ganglionar.
M: Indica la existencia o no de metástasis, al número de órganos que afecta y si está cercana o no del tumor.
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Pongamos un ejemplo con el cáncer de mama, uno de los tumores más extendidos en la población pero también uno de los que mayores casos de éxito de curación tienen.
La interpretación de un cáncer T2 N1 M0 sería la siguiente:
T2 revela que el tumor tiene un tamaño de dos centímetros. Por otra parte, N1 hace referencia a que el cáncer se ha extendido a los ganglios localizados en la axila. Con respecto al M0 indica que no existe una metástasis.
Es conveniente recalcar que existen determinadas especialidades asociadas a cada uno de los tumores que requieren del diagnóstico especializado de los profesionales de la salud, por lo que siempre es recomendable que los pacientes consulten a un especialista antes de tomar decisiones que pueden llevar a equívoco.
Asimismo, son necesarias las exploraciones periódicas por parte del paciente ya que detectar anomalías en el organismo favorece a un diagnóstico precoz y aumenta los porcentajes de éxito para los tratamientos curativos de los tumores.